Me alegra enormemente que Cristina Kirchner haya sido condenada; confío en que la instancia superior agrave la pena considerando la asociación ilícita sosteniida por los Fiscales y, en minoría, por el Camarista Basso.
No puedo entender que no hayan sido procesados todos los Jefes de Gabinete, engranajes necesarios en la cadena de la corrupción, por acción o por omisión.
No puedo entender que se haya absuelto a Julio de Vido por el beneficio de la duda, porque nada hubiera podido llevarse adelante sin su complicidad.
Al mismo tiempo me asquea la concurrencia al reducto de Lewis de jueces, camaristas, funcionarios de la ciudad, hombres de inteligencia y del grupo Clarín. No tengo dudas que las interferencias telefónicas son ilegales y el producto de los Milani o Stiuso que saben cómo hacerlo. Pero el hecho existió y creo, como dijo Pagni anoche, que nada tuvo que ver esa reunión con la causa de Cristina. Están programando el poder que viene.
Por Enrique Graci Susini.